Ahorro en familia en tiempos de crisis

Agudizar el ingenio resulta esencial a la hora de enfrentar ciertos baches económicos, o simplemente para conseguir ahorrar en los momentos en los que más se necesita. A este respecto, una de las mejores formas de cuidar de la economía comienza en la propia familia, ya que en muchas ocasiones existen gastos de los que ni siquiera somos conscientes, y que terminan repercutiendo en la propia comodidad económica del hogar. De esta manera, tanto para quienes atraviesan un momento económico más duro como para quienes simplemente quieren reducir el gasto familiar, existe una serie de pautas que pueden ayudar con el objetivo de control marcado.

Llegar a fin de mes sin arruinarse y guardando una pequeña cantidad para afrontar futuras épocas de vacas flacas es más sencillo con medidas efectivas de ahorro, que ayuden a mantener la calma ante posibles situaciones como un despido o un desembolso inesperado para el que los ingresos no resultan suficientes. Toda una serie de situaciones ante las que resultan especialmente efectivos ciertos hábitos de ahorro como:

• La norma del 10%. Son muchos los expertos que aconsejan a todas las familias plantearse el ahorro de un 10% de lo que se gana mensualmente, de cara a componer un colchón económico que ayude en las dificultades y de tranquilidad. Esta cantidad de ahorro es la ideal en opinión de los especialistas, ya que no tiene como consecuencia una disminución real del nivel de vida, pero puede salvar más de una situación familiar complicada.
• Compras de segunda mano. Comprar y vender en la red lo que se necesita o lo que ya no tendrá utilidad para nosotros, son dos buenas maneras de ahorrar. Y es que no sólo supone un menor gasto a la hora de adquirir cualquier producto, sino que puede generar ingresos extra gracias a algo que igualmente hubiese sido desechado. Piensa que las páginas de anuncios online fueron creadas para promover el ahorro, así como las tiendas de segunda mano, una forma sencilla de hacerse con lo que se necesita sin que el bolsillo sufra demasiado, y colaborando además con el medio ambiente gracias a la menor explotación de los recursos de la Tierra que se deriva de una mayor vida útil de los objetos.
• Analizar los ingresos y los gastos. Esta es sin duda la norma número uno para ahorrar en familia. Sentarse y enumerar la suma de gastos e ingresos será sin duda la forma más efectiva de saber en qué se gasta el dinero y cuanto efectivo entra realmente en casa. Tener además una libreta de gastos en la que puedan escribir todos los miembros de la familia cada gasto que realizan, es una manera eficaz no sólo de control monetario, sino también de responsabilizar a todos de la importancia de cuidar del dinero.
• Hacer ejercicio en casa. Realizar deporte en casa bajando vídeos de la red, o salir en bicicleta en familia, es una forma eficaz de ahorrar en gimnasios, un dinero muchas veces infrautilizado por la poca constancia, la pereza, o simplemente el poco tiempo real para acudir a ponerse en forma.
• Educar en austeridad. Una forma de ahorrar en familia especialmente eficaz pasa por mostrar a los hijos la importancia del esfuerzo y el valor real en trabajo del dinero. Para conseguirlo basta con poner tareas concretas en el hogar a cambio de una paga, una manera de hacerlos responsables ante el gasto y de mostrar cómo cuidar de la economía familiar.
• Ahorrar energía. Un consumo responsable de luz y agua no sólo es esencial para proteger el medio natural, si no que favorece el ahorro del hogar gracias a la reducción de las facturas.

D. Alzate