Objetivos Financieros

Objetivos Financieros

 

Cada persona debería de hacer un ejercicio para definir hacia dónde quiere llevar su situación financiera, es decir cuales son sus objetivos financieros.

Las metas que resulten de dicho ejercicio determinarán nuestras estrategias y la manera en la que enfrentamos buena parte de las decisiones que tengamos que tomar en el futuro, entonces un planteamiento mal hecho puede tener efectos bastante negativos. Por este motivo, la determinación de objetivos no es un proceso que deba abordarse a la ligera, sino más bien debería de hacerse a conciencia y considerando todas las inquietudes y necesidades que cada uno pueda tener.

Recordad, todos somos seres únicos y, por lo tanto, requerimos de distintas motivaciones para seguir avanzando.

Hay ciertos lineamientos que deberían ser comunes a todos los objetivos y que permiten que éstos sean realmente útiles y motivadores, son los objetivos smart:

Alcanzable – Es indispensable que, luego del respectivo análisis de la situación, sepamos que podemos alcanzar la meta. Nadie se beneficia de una meta que está más allá de sus posibilidades reales.

Medible – Tenemos que saber cuánto hemos avanzado y cuánto nos falta para llegar a la meta. Y debería de ser un número o un indicador fácil de calcular y sencillo de interpretar.

Específico – El objetivo debe decir exactamente qué es lo que queremos lograr. Hablar de números, en la medida de lo posible, es más útil que poner un objetivo conceptual.

Flexible – El objetivo debería de adaptarse a nuestra evolución personal, nuevas necesidades, gustos, motivaciones, etc. Seria bueno tener diferentes niveles en el objetivo

En un tiempo determinado- Por ejemplo en un mes, año, etc.. Asi nos podremos hacer metas intermedias.

 

Un objetivo financiero claro y bien definido se vería así:

Ahorraré el equivalente a 4 meses de gastos en una cuenta bancaria a modo de Fondo de Emergencia. Este dinero será usado solamente como último recurso ante una urgencia.

Pagaré los 3000$ de deuda que mantengo en mis tres tarjetas de crédito antes de fin de año. El saldo que quede en mi cuenta a fin de mes, luego de hacer todos mis pagos, irá a amortizar la deuda de la tarjeta con tasa de interés más alta hasta eliminarla. Luego seguiré con la segunda más cara y así sucesivamente.

No invertiré más de 15% de mi patrimonio total en ningún activo. Distribuiré mis inversiones en bloques para reducir mi exposición al riesgo.

Ahorrare el 10% de mis ingresos, mis gastos fijos no seran mas del 30% de mis ingresos.

 

Esto resulta especialmente importante hoy que las tentaciones abundan y que el consumismo nos incita a gastar más allá de lo que ganamos.

Es conveniente que estos objetivos sean faciles de recordar y que los llevemos siempre encima, para revisarlos con frecuencia, evaluar el nivel de avance y tomar las medidas correctivas necesarias para conseguir el objetivo.

 

Y tú, ¿tienes algún objetivo que quieras compartir con nosotros? ¿Tienes dudas con tus objetivos? ¡Cuéntanos!